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Introducción: Joanne Demmer comparte algunos de los desafíos que ha enfrentado en su rol como geofísica y explica cómo un enfoque colaborativo basado en datos puede contribuir mejor al éxito de una exploración.

Se espera que los geofísicos ayuden a responder algunas de las grandes interrogantes de la exploración.
¿En qué consiste la geología? ¿Cuál es su historia? ¿Cuáles son las limitaciones? ¿Qué calidad y qué cantidad de mineralización podemos esperar? ¿En cuánto tiempo y a qué precio?

“Debemos comprender con seguridad qué hay debajo de la superficie para poder responder estas interrogantes fundamentales y avanzar más rápido al siguiente paso”, afirma Joanne Demmer, geofísica de proyectos de Seequent.

En cualquier proyecto de exploración, las diversas partes interesadas, como los geólogos de exploración, los gerentes, los geofísicos o los consultores externos, recopilan constantemente datos valiosos de muchas maneras. Sin embargo, depender de soluciones aisladas que requieren un flujo de trabajo muy laborioso al momento de colaborar y compartir datos y resultados puede obstaculizar la exploración.

“Nuestro desafío es combinar todos los hallazgos de exploración de manera rápida y precisa para comprender mejor la historia que hay detrás de cada entorno único en el que trabajamos”, dice Joanne.

“Y cómo comunicar esta información a todas las personas involucradas en el proyecto”.
Un flujo de trabajo ágil, potente y rápido, que ahorre tiempo, reduzca los riesgos y acelere la planificación estratégica fundamental, puede ayudar.

Obtenga más valor de los conjuntos de datos

Desde el aseguramiento de la calidad hasta su control, hay muchos pasos que deben suceder en un flujo de trabajo de exploración para garantizar que usted está en el camino correcto.
Por ejemplo, verificar que los datos cumplan con las especificaciones al determinar el alcance del trabajo o durante el estudio de campo, migrar otros datos (como los datos de perforación geológicos) de manera precisa o comprender los datos químicos con respecto a los datos geofísicos.

“Recopilar y evaluar los datos de diferentes fuentes y asegurarse de tener todo lo necesario para informar a las partes interesadas puede ser un desafío”, asegura Joanne.

“Si estos desafíos no se enfrentan de manera oportuna, los equipos tendrán que esperar más para recibir retroalimentación, lo que significa que no podrán comenzar el proyecto o podría ocurrir que los desmovilicen antes de tiempo”, agrega.
Desde la importación y el procesamiento potente de datos hasta la visualización en 3D y la toma de decisiones más rápida, es imprescindible compartir, casi en tiempo real, la información y las ideas más recientes con los equipos.
Y es aquí donde brillan las soluciones innovadoras que permiten integrar los pasos complejos en este flujo de trabajo.

“Es fundamental poder integrar, interpretar y comunicar todos los datos geocientíficos con un modelado en 3D rápido y dinámico”, dice Joanne.

“Esto permite brindar análisis específicos, relevantes y continuamente actualizados, que fortalecen la precisión económica de los proyectos de exploración”.

Desafíe los límites de sus datos

Un buen flujo de trabajo también implica que los diversos equipos involucrados en un proyecto de exploración puedan utilizar las diferentes etapas de la cadena de valor en momentos muy específicos.
“La libertad de trabajar sin un cronograma lineal limitante proporciona la flexibilidad para volver al principio, ir al presente o identificar un punto exacto en el programa de exploración”, afirma Joanne.
Esta libertad permite que todos los diferentes científicos involucrados, desde geoquímicos hasta geofísicos, o desde geólogos estructurales hasta mineralogistas, brinden fácilmente su aporte particular o prueben varios modelos e hipótesis durante todo el proceso.

“Esto significa que todos pueden examinar de manera exhaustiva cómo sus datos afectan cada etapa de la exploración”, dice Joanne. “Y desafiar los límites de esos datos para obtener la mayor información y el mayor valor posible”.

También es importante que las principales partes interesadas, como el gerente de exploración, puedan auditar y verificar fácilmente la validez de los resultados en todo momento.
“Esto podría significar que nuevamente se revisen los datos sin procesar, se verifique o se pruebe la etapa del proceso o se observen las visualizaciones en 3D de la etapa optimizada para perfeccionar y destacar mejor las características objetivo”, afirma Joanne.
“O volver a recorrer las diferentes partes de la cadena de valor y, así, ver cómo tomar las medidas adecuadas para replicar los procesos o las mejoras que funcionaron”, agrega. “Y todo se guarda en un solo lugar y se puede rastrear”.

Obtenga fácilmente una nueva perspectiva con respecto a un proyecto

Brindar acceso instantáneo a la información previa y existente a todas las partes interesadas para que puedan aprovecharla rápidamente es un gran valor agregado.
“Si el proyecto se encuentra en un espacio de fácil acceso y comprensión, cualquier persona puede comenzar a trabajar en el momento en que se une al proyecto”, dice Joanne.

“Puede que esté trabajando en un predio o en una zona totalmente diferente, pero el valor de un buen flujo de trabajo equivale a que puede intervenir, empezar rápidamente y aportar sus propias ideas e impresiones de manera inmediata”, afirma.

Pero ¿cómo podemos resolver el desafío que implica controlar las versiones en un entorno de datos de exploración que cambia constantemente?
“Controlar las versiones puede ser una pesadilla”, dice Joanne. “Puede haber demasiados tipos de archivos de datos, nombres o sufijos, o quizás acceso limitado a todo un proyecto que está guardado en la computadora de una persona; y, si esa persona se retira, la información también se pierde”.
“Si no se realizan copias de seguridad correctamente, los datos pueden sobrescribirse o los datos que están almacenados en una memoria USB se pueden deteriorar con el tiempo”, agrega. “Estos riesgos suponen una amenaza para la seguridad y la perdurabilidad de los datos, lo que es importante al momento de realizar auditorías e informes gubernamentales”.
Todas las partes interesadas pueden acceder fácilmente a las versiones en 3D que se actualizan dinámicamente y se guardan de forma segura en un espacio basado en la nube, y estas versiones también muestran quién ha sido notificado de los cambios.

“Ahora, podemos ver fácilmente las decisiones que se tomaron, en función de qué, quién las tomó y en qué momento”, dice Joanne. “Y obtener una nueva perspectiva con respecto al objetivo o tratar de replicar el éxito de esa exploración en nuevos predios”.

“Un flujo de trabajo conectado también permite una mejor comprensión de cuáles son las técnicas geofísicas que proporcionan la mejor perspectiva en relación con un tipo de depósito en particular”, dice Joanne. “Y este análisis exhaustivo puede ayudar a impulsar la eficiencia en exploraciones futuras”.

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